martes, 28 de marzo de 2017

MISERIA, ESTRATEGIAS Y RADÓN






Mucho tiempo ya sin mover el blog, pero ésta es una ocasión de fuerza mayor y mi obligación moral es intentar difundir la tragedia y la corrupción que tiene que haber aquí metida para que se esté favoreciendo lo que ya se denomina un Ecocidio, y de seguir para adelante con el proyecto minero, la cosa no ha hecho más que empezar, a juzgar por lo visto hasta ahora.






                                                Encina de gran porte arrancada de raíz




Recuerdo perfectamente, cuando aún era un jodido enano y todavía vivía en un entorno más o menos urbanita, que me enseñaron lo que era el veneno y las consecuencias que tenía en  cualquier ser vivo si se llegaba a inhalar o ingerir. Desde entonces, siempre me ha dado pánico y he tratado de mantenerme alejado de él. Hipocondríaco que es uno, como dice mi madre.





        



Ahora, con los tiempos que corren de decadencia moral absoluta, donde la especulación y el dinero todo lo vale, la empresa Berkeley Minera España S.A., filial de la compañía australiana Berkeley Resources Ltd. con el beneplácito del Ayuntamiento de Retortillo, de la Diputación de Salamanca, Junta de Castilla y León, Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente y el de otros muchos políticos y peces gordos de la zona y de fuera de ella, que deberían de velar por la salud de nuestros ecosistemas y de la gente que habita en ellos, entre otras atrocidades, pretenden arrasar con 2517 hectáreas de Encina, Alcornoque y Roble del corazón del campo charro, un monte mediterráneo en perfecto estado de conservación entre los términos municipales de Retortillo y Villavieja de Yeltes, Salamanca, Castilla y León, España.



                                                  Claros en un mar de encinas visibles a muchos kilómetros de distancia



 Un espacio natural que se encuentra protegido por la directiva de hábitats bajo la Red Natura 2000 y zonas ZEPA (zona de especial protección para las aves) las riberas de los ríos Huebra y Yeltes. La finalidad de la Red Natura no es otra que la de asegurar la supervivencia a largo plazo de las especies y el tipo de hábitat con la idea de detener la pérdida de biodiversidad (aquí ya se ha empezado a arrancar arbolado y se estima que necesitarán eliminar entre 25.000 y 30.000 en lo que denominan “preparación de terrenos”)



                 
                                                        
                                                                Encinas sentenciadas





                                            Llevan semanas devastando el campo Charro





 Como digo al principio, y con la falta de concienciación ecológica que tiene la caterva que nos gobierna y manipula, ya sea pasado, presente o futuro, este atentado medioambiental no me cogería de sorpresa si no fuera por una pequeña diferencia: esta vez, pretenden acabar con los habitantes de la zona, de manera lenta y encubierta, eso sí. Hasta que lo hagan, disfrutaremos todos de los increíbles beneficios para la zona que la filial minera se jacta de proporcionar tales como el “wifi” o un parque "biosaludable"… 

Para empezar, lo que debería de haber sido una calicata, es ahora una balsa de 25.000 metros cuadrados de superficie con una profundidad de hasta 16 metros que ya está construida de manera ilegal y para la que también ha sido necesario el arranque de arbolado al igual que el desvío de la carretera comarcal SA-322, ambos, proyectos paralizados actualmente por las numerosas irregularidades detectadas e investigadas actualmente por la fiscalía.






Calicata que se les fue de las manos y ahora es una balsa                                        




                                        Enorme balsa ilegal de 25.000m2. PARALIZADA






                                 Desvío de la carretera comarcal SA-322. PARALIZADA




Nuestra respuesta, la de nuestra especie, que bajo mi criterio, y me van a perdonar, es la más dañina, codiciosa, inútil y repulsiva de cuantas existen, es estar en parte de acuerdo. Hay quién se cree la teoría y reman a favor de la empresa extranjera con la disculpa de que van a ofrecer un centenar o dos de puestos de trabajo para diez años. ¿De verdad seremos tan miserables?
¿Hasta dónde llegará la desesperación para creer lo que nos intentan vender?





                                             Cortando árbol centenario







                            Tocones de árboles centenarios sanos preparados para su destrucción







                                                      Dehesa convertida en leña







                            Maquinaria pesada utilizada para agilizar los trabajos de desmonte




El precio de escasos diez años de precario trabajo para unos pocos, será inasumible para el resto de generaciones venideras. Además, habrá mucho menos empleo del que prometen pues no habrá muchos ingenieros de mina o geógrafos en paro por la zona. Eso sí, nos premiarán con una estupenda explotación minera de 4,3 km de largo por casi 600mts de ancho y una profundidad mínima de doscientos veinte metros. Si esto fuera poco, como recompensa a la dejadez, la pasividad y al miedo a levantar la voz por el qué dirán, nos dejarán un almacén de residuos radiactivos de primera categoría, casi ná.




                              Desolador paisaje que ofrece la minería de Uranio a cielo abierto



¿Cuántos empleos dignos y de calidad van a destruir si se salen con la suya? Desde luego, muchos más de los que van a crear con su devastadora actividad.



                                La ganadería típica de la zona se verá seriamente afectada



 El balneario de Retortillo, el establecimiento hotelero con más camas de toda la provincia de Salamanca, remonta su historia desde principios del pasado siglo XX (año 1903) y de sus aguas medicinales y terapéuticas se benefician más de 6000 personas al año, se verá obligado a echar el cierre. Esto conlleva la desaparición de unos 65 puestos de trabajo directo y muchos otros indirectos, pues tendrá a escasos 500 metros la planta de tratamiento del mineral y serán del todo actividades incompatibles. Agricultores, ganaderos, comerciantes, turismo rural… cualquier tipo de actividad se verá perjudicada obligando a la gente de las zonas afectadas a olvidarse de cualquiera que fueran sus planes de futuro.




                                           Balneario de Retortillo con 114 años de historia





                                               Ganado ovino bebiendo en el Yeltes


                               




                             Ganado bovino paciendo en terrenos dedicados a la mina de uranio




                                      Vistas del balneario desde el puente sobre el río Yeltes




Contaminarán el agua, el aire y la tierra, elementos indispensables para la supervivencia de cualquier ser vivo, con isótopos radioactivos, infinidad de productos químicos y gas Radón.
Cambiarán totalmente la orografía del terreno a un ritmo de cinco mega voladuras semanales, para mover miles de toneladas de tierra y sacar unas pocas toneladas de óxido de Uranio para combustible nuclear y su enriquecimiento para fabricar ¡vaya usted a saber!



                                      El proyecto contempla cinco megavoladuras semanales



Las zonas más afectadas, que ahora gozan de una extraordinaria salud e incalculable belleza y biodiversidad, quedarán arrasadas y estériles, como de otro planeta. Con el agresivo desmonte que se está llevando a cabo actualmente, una pareja de cigüeñas negras que anidaban en la zona ya han desaparecido y los milanos reales y negros, águilas calzadas, culebreras europeas, alimoches, tejones, una pequeña colonia de buitre leonado… todo tipo de especies vegetales y un sinfín de animales eminentemente forestales ya han empezando a notar las negativas consecuencias de la devastadora tropelía, pues estamos ahora en la época más crítica para la reproducción de las especies y su entorno ya está incomprensible e irreparablemente alterado.


                                         Zona todavía virgen. Si no se impide, la arrasarán





                                                                   Corazón de Roble




                                                                 Zona ya destrozada




El polvo en suspensión procedente de las mega voladuras diarias, del trasiego de los mega camiones, de la molienda para extraer el mineral, y el sedimentado en las mega escombreras permanentes, podrá ser esparcido en pocos minutos a muchísimos kilómetros a la redonda a merced de las corrientes de aire; que nadie piense que esto sólo le afecta a los del pueblo de al lado, pudiendo generar graves perjuicios para la salud pública ya que al entrar en contacto con los organismos, aumenta exponencialmente el riesgo de padecer todo tipo de cánceres, especialmente los de pulmón, ocasionar daños severos en órganos internos o incluso afectar a la reproducción.



                                                Efectos de una voladura a cielo abierto



                                                                   


Necesitarán utilizar ingentes cantidades de agua pública, unos 3.664.260 litros de agua/día, elemento que escasea por la zona, precisamente, y cuyo permiso para tal expolio ya se ha resuelto a favor por parte de la  Confederación Hidrográfica del Duero, previo pago. Cuando el río no disponga del suficiente caudal de agua para bombear a la mina, secarán todo lo que tengan a su alcance. Es una empresa minera y ya deberíamos saber todos cómo actúa este tipo de industria criminal.






 Punto exacto de dónde el agua pública será expoliada a un ritmo de Tres millones, seiscientos             sesenta y cuatro mil doscientos sesenta litros al día




       Imágen que puede verse cada año de forma natural en la época de estío en nuestros ríos Huebra y         Yeltes.



El agua contenida en las balsas, mezclada con sustancias químicas de alta toxicidad, se filtrará en acuíferos y manantiales pues está demostrado que los materiales que cubren éstas balsas de lixiviación con los componentes de ácido sulfúrico, sosa cáustica etc.., se desvirtúan y nunca llegan a los 50 años de efectividad en el mejor de los casos mientras que los componentes químicos duran miles de años. Lo que no se filtre, siempre correrá el peligro de esparcirse tras rebosar de las balsas de lixiviación o por roturas de las mismas y podremos salir en la tele llorando y lamentando que esto se veía venir, que ya estaban avisados y que hemos sufrido un accidente ambiental sin precedentes en nuestro país, amén de la ruina económica que supondría mitigar tal impacto y lavar la imagen de cara a la galería.





                                             Consecuencias de vertidos o roturas de balsas



El siguiente paso es el de los vertidos. Nuestra patriótica Confederación autoriza hasta nueve puntos de vertido. El “agua” resultante de la actividad para la extracción del Uranio será vertida de manera premeditada y homicida a los arroyos Caganchas, Santidad y Valdemanzano además de a los ríos Yeltes y Huebra.




                                                 Zona de vertidos en el arroyo Caganchas




 Aquí conviene destacar lo que la Confederación Hidrográfica del Duero autoriza en el proyecto de depuración y vertidos, previo pago de canon de 51.659,91€/año, para que todo el mundo vaya tomando conciencia del problema. Será un conglomerado de compuestos químicos tales como: arsénico 15 kg/año, níquel 120 kg/año, cadmio 3kg/año, cobre 72 kg/año, zinc 300 kg/año, cromo 50 kg/año, plomo 30 kg/año, hierro 300 kg/año, manganeso 200 kg/año etc… Esto que se sepa, el día que viertan a ver quién está aquí haciendo las mediciones oportunas para controlarlo.

Se autoriza un vertido anual a las cuencas de UN MILLÓN, QUINIENTOS OCHENTA Y DOS MIL, NOVECIENTOS TREINTA metros cúbicos CADA AÑO de vida de la mina.

Hay que contar también con el agua de lluvia, que arrastrará a los cauces de ríos y arroyos todo tipo de sedimentos provenientes de la explotación agravando el problema de contaminación, estimaciones incuantificables que no parecen contemplar en ningún estudio.


                                      Desembocadura del arroyo Caganchas en el río Yeltes




                                     Cigüeña negra foto trampeada en el arroyo Caganchas.




    Foto trampeo de Cigüeña negra en día diferente. Demuestra la querencía que tenía por el arroyo



No se les permite la captación o el vertido de aguas al río Yeltes durante los meses de Julio, Agosto y Septiembre. Todo un detalle.


 El río Yeltes se une al Huebra en el término municipal de Bogajo y de ahí dejarán todas las vegas y riberas contaminadas con metales pesados hasta su desembocadura en el Duero ya en las vecinas tierras portuguesas. 



                                        Lugar donde los ríos Huebra y Yeltes unen sus aguas



Se estima que podrán verse afectados hasta los vinos de Oporto y los portugueses están ya realmente preocupados ¿De dónde beberán luego los animales? ¿Quién tendrá valor entonces para comer una chuleta de cualquier cosa que se haya alimentado en estas tierras? ¿Vendrá acaso el ahora comisario de energía Cañete, en uno de sus alardes de valentía, a catar los productos con estigmatización de Origen?


Río Duero a su paso por Portugal. Las riberas se verían seriamente afectadas


Llegados a éste punto, no sé si alguien que no se lleve una generosa comisión aún lo verá viable. Si hay alguno, que envíe una señal por favor.
 Los intereses privados nunca pueden anteponerse al bien común pero aquí, en estas tierras olvidadas al Oeste de nuestra capital Europea de la Cultura, el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, la JCyL, la CHD, el Presidente de Iberdrola (natural de Villavieja de Yeltes), el ex alcalde de Retortillo, junto a tres de sus concejales, por citar algunos, si parecen verlo rentable al permitir y favorecer semejante Ecocidio.


   Juan Vicente Herrera, el honorable presidente de la JCyL reforestando. Él ni pone ni quita minas.



Jose Ignacio Sánchez Galán. Presidente de Iberdrola. El, necesita Uranio para combustible nuclear




Eustaquio Martín Herrero, concejal de Retortillo y trabajador de Berkeley ¿Como se le llama a eso? rindiendo cuentas ante la guardia civil.




Luego están, cómo no, algunos de nuestros queridos y respetables medios de comunicación. Con la capacidad que disponen para influenciar a la opinión pública, demuestran con sus publicaciones, la baja categoría moral de la que hacen uso cuando quieren. Algunos más traidores, miserables y difamatorios que otros, desvían la atención con artículos superficiales infundiendo un miedo innecesario con hechos inexistentes omitiendo, en muchas ocasiones, la dura realidad.

De vez en cuando, (suele coincidir cuando las acciones de la minera Berkeley se desvalorizan) salta a la palestra algún que otro osado “expertillo” que pone todos los datos científicos en entredicho afirmando sin reparo que la cosa no es para tanto, o que el arranque del arbolado viejo es necesario y beneficioso, o que la zona ya está lo suficientemente deprimida como para notar las consecuencias de la actividad minera… No merecen más comentarios.




                                                       Depredando el monte sin parar





      Dos enormes alcornoques supervivientes. Por poco tiempo. Parece una broma de mal gusto




A mí aún me resulta incomprensible que pudieran conceder una declaración de impacto ambiental favorable, tratándose de una zona de alto valor ecológico y protegida bajo la Red Natura 2000 con zonas LIC y ZEPA, y que las trabas burocráticas que se han ido encontrando en el proyecto hayan sido tan escasas como aceleradas.


                                                     Zona destinada para megaescombrera





Todo éste entorno desaparece. La primera en abandonar, una pareja de Cigüeñas negras que criaban en la zona.





                   Ecosistema en peligro de extinción por extracción de Uranio. También desaparece



La magnitud del problema sobrepasa cualquier razonamiento y creo que es la hora de actuar.
Llegamos con un poco de retraso, pues se han dejado pasar unos años muy valiosos entre el silencio y la incredulidad absoluta cuando el problema se veía venir y ya hay ocasionados daños irreparables en el patrimonio de todos los Salmantinos que nunca debieron consentirse, pero no es tarde para alzar la voz y movilizarse todos unidos para detener la barbarie que pretenden seguir acometiendo. Son las únicas fórmulas que conozco, la unión y la movilización.





                                                 Monte irrecuperable en cientos de años




                                                Desesperación e impotencia. DEP





                                        Métodos de trabajo utilizados por los deforestadores





                                    Fumanchú. Él, parece que disfruta con lo que hace





                                                              Ellos... hacen el Agosto




Hay muy poco tiempo para reaccionar y actuar y cada día que pasa, unos sesenta árboles centenarios están siendo víctimas de la barbarie y la codicia. Ahora vemos lo que hacen que es arrasar y devastar un espacio protegido pero en el momento que cierren los 27 kms de perímetro, lo que suceda allí dentro no lo va a saber ni Rita la cantaora


.                                                                      La perdición



Sólo el tiempo pondrá cada cosa en su lugar y yo sólo deseo que nuestra riqueza y la de todos, Alcornoques, Robles y Encinas sigan en el suyo otros cien, doscientos o quinientos años más.




                              DESPERTAD. AHORA PASIVOS, LUEGO RADIOACTIVOS



NO A LA MINA, NO AL URANIO, NO A LA ENERGÍA NUCLEAR

Adiós

martes, 17 de junio de 2014

EL UROGALLO PIRENAICO (Tetrao urogallus aquitanicus)





¡Hola a tod@s!



La nueva entrada que hoy me ocupa en este humilde blog, está dedicada a una de las aves más espectaculares a la vez que exiguas y emblemáticas de nuestra península ibérica. Se trata como no, del hechizante Urogallo pirenaico (Tetrao urogallus aquitanicus)

Existe en nuestro enfermo país, otra sub especie más amenazada si cabe, que se extiende por la cordillera cantábrica y entre Asturias y León. (Tetrao urogallus cantabricus) Poblaciones que si no se toman medidas efectivas de inmediato, están condenadas a la extinción, lamentablemente.

Es un ave ligada a entornos eminentemente forestales, a bosques de montaña y significa todo un reto para la conservación de sus hábitats, cada vez mas mermados por la presión humana. Son los prisioneros del bosque, como los denominó en su día el Dr. Félix Rodríguez de la Fuente.

Se trata de un animal sedentario, es decir, permanece en la península durante todo el año, aunque no es nada fácil poder observarlo fuera de la época de reproducción.

Es precisamente en este periodo, en primavera, cuando cobra su mayor y espectacular actividad, tornando sus hábitos arborícolas por los terrestres, y siendo posible observar su extraordinaria conducta, sobre un impresionante escenario en pleno bosque, que te trasporta casi a otros tiempos.

Consiste el celo del Urogallo, en unos rituales de lo más llamativos y parece ser que rigurosamente jerarquizados, siendo los machos más viejos y poderosos los que se hubicarán en el centro del cantadero, mientras los más jóvenes ocuparán los extremos, los sitios con menores probabilidades de cortejar a una hembra. Con una serie de sobrecogedores sonidos casi ultrasónicos, acompañados de unas posturas chulescas y desafiantes, extenderán la cola en forma de abanico, dejarán caer las alas y no dejaran de hinchar las plumas del buche, emitiendo el característico redoble acompañado del taponazo, mientras se pavonean con la mas dominada técnica de la galantería, con el fin de atraer a sus dominios a las preciadas hembras y poder copular con ellas para perpetuarse. Sólo llegaran a los vistosos y ritualizados combates, cuando dos machos coincidan en una determinada zona de su terreno y las primeras fases intimadatorias, no hayan resuelto quién es el más poderoso, el mejor adaptado. Es entonces cuando la pelea está asegurada, e intentarán darse unos potentes aletazos mientras saltan, tratando de clavarse los espolones. El vencedor, se ganará el derecho de las hembras y el vencido, se retirará de la zona del combate, esperando alguna oportunidad desaprovechada por los gallos más fuertes, si es que la hubiere.





Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 5.6   ISO 800   -0.3 ev   a 365mm.   Hide


Esta especie, tiene un dimorfismo sexual muy acusado siendo los machos muy diferentes que las hembras. Estas, son bastante menos espectaculares y más pequeñas, de unos colores pardos, que le otorgan el mimetismo o camuflaje necesarios para la crianza de los polluelos, ya que llevan a cabo todo el vital proceso de reproducción solas, y lo hacen en el suelo.

Pondrán entre seis y diez huevos depositados en una pequeña depresión del terreno, que tapizarán con vegetación de la zona y generalmente, lo harán al pie de un árbol. Incubarán durante un periodo aproximado de cuatro semanas, tras el cual nacerán los pollos de naturaleza nidífuga. Esto significa que los pollos, inmediatamente después de romper el cascaron, abandonarán el nido para ser conducidos por su madre a lo mas frondoso del amenazado bosque, donde comenzarán a alimentarse con algunos frutos silvestres y principalmente de insectos como la hormiga.

A pesar de lo numeroso en la puesta, esto no debe de llevar a engaños pues el éxito en la supervivencia de los frágiles pollos es sumamente bajo, llegando al primer año de vida menos de un veinte por ciento, de manera que la supervivencia de la especie se consigue gracias a la longevidad de los adultos.

Además, no es el único problema con el que cuenta esta especie de tetraónida, ya que cada vez es mayor el número de sus depredadores naturales, que van desde la pequeña Marta hasta el gran Jabalí, pasando por el espabilado zorro y otros muchos. Me refiero a la predación de los nidos.

A esto hay que añadirle las molestias que sufren estas aves durante el riguroso invierno, el momento más crítico de sus vidas, ya que cualquier esfuerzo extra, tratando de escapar de sus peligros, hace que consuman de manera acelerada sus escasas reservas con las que cuentan para pasar la dura estación, y corren el peligro de morir por debilitamiento.

Tenemos el deber y la obligación de proteger primero, sus bosques, y después a esta mítica especie.



Para conseguir fotografiar a esta delicada especie, ni que decir tiene que he tenido que contactar con profesionales dedicados en este proyecto ya que de cualquier otro modo, viviendo a cientos de kilómetros del Urogallo más cercano, me hubiera resultado del todo imposible.

Hoy en día, existen empresas especializadas como Wildwatching Spain, que con la colaboración de grandes profesionales y auténticos maestros de la materia, como Javi Montes, hacen posible la realización de este tipo de sueños para un ser como yo.





Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM.   1/800 seg   f 5   ISO 800   -0.3 ev.   Hide







Pasado el medio día, a eso de las cuatro, estoy ya en Vielha, provincia de Lérida, puntual como un reloj, donde he quedado con el que será mi guía durante el resto de la tarde y parte de la mañana del día siguiente.

He llegado recreándome con los apabullantes paisajes que ofrece el entorno, masas forestales como pocas he visto, riachuelos puros que empiezan su razón de ser en las escarpadas cumbres pirenaicas, lagos de color turquesa que forman un conjunto, capaces de erizar hasta los pelos de la barba cuando uno contempla semejante espectáculo natural por primera vez.

Tras el bistec con patatas fritas y su correspondiente guarnición que me metí entre el pecho y la espalda antes de quedar con el Aranés Javi, enseguida fui a su encuentro en el lugar acordado, para comenzar a recorrer el escaso trayecto en coche que nos llevaría al inmenso bosque de Pino negro donde intentaremos conseguir nuestro objetivo, fotografiar al gran Urogallo pirenaico. Todavía quedaba una dura ascensión entre la maraña de pinos antes de llegar al paraíso de las aves, su cantadero, un clarete de bosque en lo alto de la montaña, con las faldas aún nevadas.

Con el liviano equipaje a cuestas, comenzamos la ascensión sin saber cuándo acabaría aquella tortura para mis maltrechas rodillas. Había que superar un desnivel aproximado de 225 metros en un escaso kilómetro, pero que kilómetro. Mi salvación era el espectacular bioma que nos rodeaba y que cada vez que parábamos para coger aliento, te animaba a seguir adelante, hasta donde hiciera falta.
 El ligero equipaje, comienza entonces a convertirse en un gran lastre que hay que soportar a toda costa. Un lastre de 32.5 kgs de aperos tecnológicos y de supervivencia, pesados expresamente a mi retorno del viaje, en la báscula de casa de mi abuela, ya que tenía una gran curiosidad de saber mis límites. Menos mal que el hide ya estaba colocado allí porque si me toca llevarlo a mí, no sé cómo lo hubiera hecho.

Por fin, comenzamos a divisar los pequeños hides portátiles, colocados estratégicamente por el cantadero con anterioridad, para preservar la intimidad de las aves. Esa era la señal de que habíamos llegado y al menos a mí, se me quitó un gran peso de encima, literal.

Enseguida, una vez elegida la ubicación de cada uno, comenzamos a meter nieve en el interior de los hides ayudados por palas, con el fin de hacer un suelo compacto y regular, donde poder pasar la noche, a algo más de 2000 metros de altura, con mayor comodidad.

Una vez terminado el acondicionamiento de los hides, cada mochuelo a su olivo. Nos metimos cada uno en el nuestro, aun temprano y a plena luz, para esperar con impaciencia a todo lo que se pudiera desarrollar en esa pequeña parcela de bosque.

Comienzo a tomar las medidas al habitáculo cual animal por primera vez enjaulado y paso los minutos escribiendo mi pequeña crónica, lo que hasta ahora estaba dando de si la intensa experiencia, en mi inseparable cuaderno de campo, entre otras muchas cosas que daban tiempo de hacer.

 Los nervios me atenazan y no dejan paso al apetito y si bien dispongo de comida, no pruebo bocado hasta la noche del día siguiente. Caprichos de la tensión acumulada.

El sol empieza a esconderse dejando paso a la noche, y en el silencio más absoluto, pronto se empiezan a dejar sentir los primeros fantasmas del bosque, los prisioneros de éste, los machos de Urogallo.
Todas las peripecias necesarias para estar aquí, en este momento y en este lugar, empiezan a cobrar ahora sentido, y te olvidas de todo para intentar no perderte ningún detalle, ningún sonido.

Os puedo asegurar sin temor a equivocarme, que la primera vez que escuchas a uno de nuestros últimos Urogallos, te quedas petrificado ante el espectáculo acústico que emiten de sus poderosas gargantas.

Para verlo, aún tendría que esperar unas cuantas horas más. Una larguísima espera ya que como presentía, no podía pegar ojo con la tensión del momento y con la incertidumbre de lo que acontecería con el alba.

Muchas emociones a la vez en la cabeza, incapaces de procesarlas todas por las escasas neuronas de que dispongo.

Por fin llegó el momento y empieza a clarear en lo tupido del bosque. Por la noche, dejé uno de los trípodes ya colocado con su respectiva maquinaria de hacer fotos, la más pesada, para no tener que hacer ningún ruido o movimiento extraño que pudiera delatar mi presencia en el lugar. El otro trípode, lo coloco nada más salir del saco de dormir y ponerme las botas de campo, a las cinco de la mañana, intentando captar otras prespectivas del cantadero.

El nerviosismo se acentúa desproporcionadamente cuando empiezo a ver corretear las primeras siluetas entre los troncos de los pinos y por más que trato de relajarme, soy incapaz de conseguirlo. La situación me desborda y ya no sé a dónde mirar. No tiene nada que ver a lo que uno está acostumbrado, un escenario mejor o peor trabajado y a más o menos medida de las circustancias. Esto es completamente distinto. Caza fotográfica en estado puro diría yo. Tú no controlas nada, ni el escenario, ni por donde se moverán las aves, tampoco la escasa claridad, sabes que no te volverás a ver en una como éstas en mucho tiempo, ni siquiera la accidentada orografía del terreno ayuda, pero esto es la magia de esta agradecida afición y lo que en definitiva, genera la adrenalina del momento, y te hace poner a prueba, al individuo primero, y al equipo fotográfico después.





Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM.   1/160 seg   f 2.8   ISO 1000.   Hide




 En estos momentos, descubro de un plumazo todas mis carencias en lo relacionado a la fotografía de fauna salvaje, pero estoy aquí y tengo que intentar sacar el máximo de lo que dispongo.

Los gallos de monte siguen con su frenética actividad, ajenos a los movimientos de las cámaras. Mientras, intento inmortalizar esas poses guerreras y con el paso del tiempo, empiezan a divisarse a las primeras hembras, atraídas por el cortejo y los sonidos de los potentes machos, con el fin de buscar un buen ejemplar, un ejemplar fuerte con el que aparearse y traer al mundo a la nueva generación de Urogallos.

Yo no sabía ya, si aquello estaba pasando en realidad o estaba viviendo un sueño del que no quería despertarme pero pronto, me di cuenta de que la realidad, supera en ocasiones a la ficción. Tenía entonces una hembra frente a mí, algo lejana y tapada por uno de los numerosos árboles, siendo perseguida por un galante y encelado macho. De pronto, en una carrera fulgurante que no supe prever, se plantaron a escaso metro y medio de mí, de mi hide, y me quedé paralizado por temor a ser detectado a tan corta distancia. Tenía a escasos centímetros, la pareja de una de las más emblemáticas aves de nuestra península y yo sin saber que hacer. Finalmente decidí no correr el riesgo y quedarme inmóvil. Eso sí, sin perder detalle de lo espectacular de la especie, sobre todo del macho.
 Pocos segundos permanecieron y pude volver a recobrar el aliento.

A lo largo de la jornada, tuve varias ocasiones de documentar algo decente, al menos para mi, aunque bien me hubiera gustado traerme muchas más fotografías.





Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160   f 5.6   ISO 1000   -0.3 ev.   Hide




Con el avance imparable del tiempo, que se esfumó en un abrir y cerrar de ojos, la actividad en el cantadero empieza a descender por ese día y los recios Urogallos, comienzan su retorno a lo intrincado del bosque buscando la seguridad. 
Aún tendría que pasar una hora larga desde que se marchara el último ejemplar, para poder salir de los escondites sin causar ninguna molestia en este periodo tan crítico para la especie.

Javi, que es un profesional como la copa del pino donde cantan los Urogallos, sabe bien elegir el momento adecuado para comenzar el descenso hasta el coche y tan rápido como nos fue posible, abandonamos el lugar montaña abajo, con el dulce sabor de haber sido testigo directo de un de los espectáculos más grandiosos de nuestra fauna salvaje.

Hay que tener cuidado de no tropezarse durante el descenso pues la inercia en esa situación, puede ser fatídica, pero obviamente este es mucho más rápido y relajado que la subida.

Llegamos al coche y la aventura fotográfica va tocando a su fin. 

Bajamos de nuevo a Vielha donde pudimos tomar una merecida cervecita fresca mientras cambiábamos impresiones. Después, Javi tuvo el detalle de enseñarme algunos de sus trabajos impresos en papel, y sinceramente, me quedé embobado con la calidad en la ejecución de sus fotografías. 

Sin tiempo para más, me hubiera encantado quedarme toda la vida, tocaba la hora de la despedida y ponerme de nuevo rumbo al pueblo. Aún quedaban unas etresantes nueve horas para llegar.

La cara de imbécil que llevaba uno en el coche, ya en el regreso, era de sobresaliente.

Poco me importaban entonces los 1632 kms devorados en 17 horas y 20 minutos, ni el cansancio relativo acumulado. Sólo quería llegar a casa de mi abuela para pesar todo el equipo y contarle que estaba vivo, que lo había superado. La pobre se quedó de lo más disgustada cuando me fui, pero ha de saber, que mala hierba nunca muere.

Esa noche, ya más relajado, me puse a comer Pizza hasta que me harté.

Luego, a la camita a descansar, con una botella de agua fresca de litro y medio para mitigar los ardores de estómago que produce la salsa barbacoa a esas horas y la verdad, caí rendido y descansé como nunca.

Quiero agradecer a mi familia el aguante que tienen con migo, por permitirme hacer este tipo de locuras. Sin ellos, no me hubiera sido posible.

A la empresa Wildwatching sus servicios prestados y a Javi Montes, su profesionalidad y disponibilidad en todo momento para aclararte cualquiera de las muchas dudas que a uno le iban surgiendo.

Os dejo como siempre con algunas de las fotografías conseguidas y un pequeño texto del Dr: Félix Rodríguez de la Fuente sobre esta especie en particular y que cada uno saque sus propias conclusiones.



Un saludo y hasta la próxima.






Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM.   1/500 seg   f 2.8   ISO 640   -0.3 ev.   Hide




El Urogallo no solo es tema de estudios ornitológicos. En los últimos tiempos, se ha transformado en polémica noticia de los periódicos. Y es justo que millares de voces proteccionistas se hayan alzado a favor del místico gallo de bosque. Porque difícilmente puede concebirse una criatura que sintetice el misterio, la solemne belleza, la récia melancolía del bosque cantábrico como el Urogallo.
Respetamos y comprendemos  la pasión ancestral de la caza. Pero todo buen cazador es implacable en el respeto a su propio código de disciplina venatoria. Ya se han matado bastantes Urogallos. Ya hay suficientes trofeos decorando salones y bibliotecas de nuestros pro-hombres. Permitamos que el resto de nuestras tetraónidas disfruten de lo poco que les queda de sus últimos paraísos ibéricos. No olvidemos que los Urogallos españoles, tanto los pirenáicos como los cantábricos, particularmente estos últimos, son poblaciones aisladas, restos cuaternarios de un grupo ornítico que prosperó en las taigas glaciares y permanecen prisioneros de nuestros bosques de montaña, con el mismo valor prehistórico y paleozológico que puedan tener las pinturas de los bisontes de Altamira. Con la particularidad de que los urogallos están todavía vivos.


Dr: Félix Rodríguez de la Fuente        (hace más de 34 años)





Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM.   1/1250 seg   f 4.5   ISO 800   -0.7 ev.   Hide












Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/100 seg   f 5.6   ISO 640   a 400mm.   Hide










Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/100 seg   f 5.6   ISO 800   +0.3 ev   a 400 mm.   Hide









Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM.   1/400 seg   f 6.3   ISO 800   -1 ev   Hide












Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/200 seg   f 5.6   ISO 800   -0.3 ev   a 400 mm.   Hide












Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 5.6   ISO 800   -0.3 ev   a 400 mm.   Hide









Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM + extender 1.4x.   1/400 seg   f 6.3   ISO 640   -0.3 ev   Hide










Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM.   1/1000 seg   f 4.5   ISO 800   -0.7 ev   Hide










Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 5.6   ISO 800   -0.3 ev   a 365 mm.   Hide










Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 5.6  ISO 800   -0.3 ev   a 400 mm.   Hide










Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 5.6   ISO 800   a 350 mm.   Hide









Canon EOS 1D Mark IV y 400 mm f 2.8 USM + extender 1.4x.   1/200 seg   f 6.3   ISO 640   -0.3 ev.   Hide







Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 6.3   ISO 640   a 400 mm.   Hide








Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 5.6   ISO 800   -0.3 ev   a 400 mm.   Hide









Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/500 seg   f 5.6   ISO 800   -0.3 ev   a 400 mm.   Hide








Canon EOS 1D Mark III y 100-400 mm f 4.5-5.6 IS USM.   1/160 seg   f 5.6   ISO 800 -0.3ev   a 400 mm.   Hide